¿Qué es un Seguro
y Por Qué lo Necesitamos?
El seguro es un mecanismo para proteger a las personas contra pérdidas, daños, lesiones y costos asociados con eventos imprevistos.
El seguro se define generalmente como un método para distribuir el riesgo de pérdida a través de un mecanismo de agrupación. El seguro brinda protección contra un evento predecible que surge inesperadamente. Quienes puedan sufrir dicha pérdida compran un seguro mediante el pago de primas, que se utilizan para pagar las pérdidas que puedan surgir.
Las pérdidas aseguradas pueden surgir a través de eventos naturales, como terremotos, inundaciones, huracanes, tormentas de viento y otras causas naturales. También pueden surgir de eventos provocados por el hombre como se vivió el 11 de septiembre de 2001.
Después de ese trágico evento, las compañías de seguros proporcionaron miles de millones de dólares en cobertura por las pérdidas que surgieron. Además, a través de la venta de productos y servicios de seguros de salud y de vida, las aseguradoras brindan cobertura por pérdidas humanas debido a enfermedades, lesiones y muerte.
Tanto las empresas como los individuos compran seguros para protegerse contra las incertidumbres que causan pérdidas tanto financieras como personales. El buen funcionamiento de nuestras familias, negocios, corporaciones, de la sociedad misma, no puede mantenerse de manera efectiva sin la protección del seguro contra pérdidas que pueden surgir inesperadamente en algún momento de nuestras vidas.
En caso de pérdidas cubiertas por una póliza de seguro, la compañía de seguros pagará las pérdidas de acuerdo con los términos de la póliza.
Una política describe específicamente las pérdidas que están cubiertas, ciertas exclusiones para las cuales no se proporcionará cobertura y los límites de la cobertura. Por ejemplo, si el límite de la póliza es de $100,000 en la póliza de un propietario y la casa se destruye por un incendio, el nivel máximo de cobertura de la compañía de seguros será de $100,000. Es muy importante comprar la cantidad correcta de cobertura para protegerse contra posibles pérdidas.